Quemando Mi Barco



 Navegamos por un mar
de calmas muertas y tempestades mudas.
Divagamos por corrientes poderosas
de pobrezas y futuro interferente
que zarandeaba nuestro hermoso barco que jamás abandoné.

Un buque hecho de alicientes, cáscaras de nueces,
trabajo por vela mayor y tu presencia por timón.
Un barco pequeño de madera oxidada por mi falta de aire.
Pero un barco donde cabíamos los dos y nuestros sueños.

Naufragamos y aún no sé porqué
y por todas las razones de siempre.

Buscabas la libertad que siempre tuviste
y te ahogaste justo en una orilla de una isla nueva.
Sin ti quemo este barco en pleno océano.
Que arda este amor vivo.

Navegaré ahora en mi cáscara de nuez rescatada,
cascotes de madera a los que les empieza a nacer vida.
Navegaré, como siempre, siguiendo el sol
y las estrellas que dibujan clips;
rumbo a la felicidad con cicatrices de ti.

Fotografía Tomohide Ikeya 
10juniol2023